Después de más de 18 meses desde que comenzó la pandemia de COVID-19, la forma de trabajar ha cambiado para siempre. Atrás quedaron los días en los que todos los empleados iban a la oficina. Y esto puede significar que los inquilinos podrían cambiar o reducir el espacio que alquilan. Así que, ¿cómo puedes asegurarte de seguir obteniendo la máxima ocupación en tu edificio?
La seguridad es lo primero
"Lo más importante es asegurarse de acondicionar el edificio y rediseñar las zonas comunes para que la gente se sienta segura al volver a la oficina", afirma Adrian Bojczuk, EMEA Investors and Landlords Client Development Director. "Hay muchas cosas que puedes hacer para que las empresas a las que alquilas quieran quedarse en tu activo y prolongar los contratos porque se sienten cómodas allí. Estas soluciones también llamarán la atención de los posibles inquilinos. Esencialmente, un enfoque user-friendly y centrado en los inquilinos es clave ".
Las medidas de seguridad tras la pandemia utilizarán tecnología inteligente. Hay muchas zonas comunes en las que los propietarios pueden marcar la diferencia y transmitir tranquilidad a los usuarios de sus edificios. Algunos ejemplos son: tener termómetros inteligentes en las zonas de recepción que puedan detectar si alguien tiene fiebre; luces UV en los ascensores para limpiar la cabina antes de que llegue a la planta en la que se le ha solicitado; e instalar sistemas de climatización energéticamente eficientes que también incluyan lámparas UV para que limpien el aire que circula por tu propiedad.
Los espacios sociales pueden marcar la diferencia
"El mayor impacto que se puede tener es en las zonas comunes", continúa Bojczuk. "No sólo tienen que ser sostenibles, sino que deben tener un factor sorpresa. Y lo que es más importante, deben ofrecer algo más a los que se desplazan a la oficina".
Los edificios que ofrecen algo más que una oficina conseguirán atraer a los inquilinos. "La gente se desplazará a una oficina si también puede ir al gimnasio, a la tintorería o a tomar un café en el mismo edificio".
Los edificios de oficinas deben convertirse en un centro en el que la gente haga algo más que trabajar; si pueden ocuparse de otros aspectos de su vida cotidiana, es más probable que visiten la oficina. La incorporación de estos servicios atraerá a los inquilinos porque pueden ofrecer comodidad a sus empleados, sustituyendo la necesidad de hacer recados fuera de su horario de trabajo. La gente suele tener poco tiempo, así que si pueden aumentar el tiempo libre que tienen, lo harán.
Bojczuk también enfatiza la importancia de las primeras impresiones. "Como propietario, necesitas una zona de recepción que haga algo más que recibir a la gente. Debe ser funcional y un destino en sí mismo".
Él recomienda tener muchos asientos cómodos, preferiblemente rodeados de vegetación, para que la gente pueda relajarse, atender llamadas privadas o incluso reunirse con otras personas. "Tus zonas comunes van a marcar la diferencia y los inquilinos elegirán su espacio de oficina en función de lo que puedas ofrecerles como extra, al margen del espacio que realmente están alquilando".
Compartir es cuidar
La pandemia ha alterado nuestro comportamiento y actitudes ante el trabajo y la vida. "Una de las mayores diferencias que hemos observado es el número de personas que utilizan el coche en lugar del transporte público, lo que puede suponer un problema de aparcamiento", afirma Bojczuk. La tecnología puede ser muy útil en este caso. En lugar de tener plazas de aparcamiento exclusivas para los altos cargos -que quizá no vayan a la oficina todos los días-, Adrian sugiere que los propietarios utilicen un sistema de hotdesking para las plazas de aparcamiento. "Si la gente puede reservar una plaza antes de ir a la oficina, eso no sólo les anima porque pueden llegar con seguridad, sino que también utilizará el espacio de forma inteligente".
Con una vuelta a la oficina lenta y constante para la mayoría de la gente, es fundamental que pienses en cómo puedes renovar y añadir valor a tu edificio. Utilizar el espacio de forma inteligente y reutilizar las zonas comunes puede ser de gran ayuda, al igual que introducir más medidas de seguridad y salud para que la gente pueda utilizar tu edificio con total tranquilidad.